"Nunca imaginé que gracias al cáncer iba a encontrar mi leyenda personal, lo que hace que te levantes cada día con ilusión"
"Somos más fuertes de lo que creemos"
Sandra Ibarra tenía un sueño: ser modelo y comunicadora. A los 20, su vida discurría como siempre había soñado. Hasta que de pronto, todo cambió. Le diagnosticaron cáncer en la sangre. Aquí empezó su lucha por la vida. Después de “brutales” tratamientos de quimioterapia y un trasplante de médula de su hermano pequeño, consiguió superar la enfermedad y retomar su vida. “Somos más fuertes de lo que creemos”. Gracias al optimismo y la esperanza que te da la juventud, volvió a empezar.
Obviamente, Sandra no era la misma persona. Su escala de valores había cambiado. Comenzó a colaborar con asociaciones para ayudar a otros enfermos.
Sin embargo, siete años más tarde, el cáncer volvió. “Fue uno de los días más duros de mi vida; me preguntaba para qué había luchado, para qué me dedicaba a luchar por los demás”. Vuelta a empezar. Quimioterapia de choque con efectos secundarios durísimos. Otro trasplante de médula. “Ojalá todos pudiéramos vivir durante un tiempo como si fuera la última vez, para recordarnos lo privilegiados que somos, la cantidad de cosas que nos perdemos por no prestar atención”.
Sandra trabaja y lucha cada día para ser feliz. “Nunca imaginé que gracias al cáncer iba a encontrar mi leyenda personal, lo que hace que te levantes cada día con ilusión”: la Fundación Sandra Ibarra de Solidaridad frente al Cáncer, donde trabajan con el sueño de que algún día el cáncer se pueda curar, apoyando la investigación y con la prevención.
En nuestra vida, podemos ser protagonistas o víctimas de la adversidad. “Elijamos ser protagonistas. Mi sufrimiento, nuestras vivencias nos tienen que servir para algo, tenemos que ser capaces de entenderlas, de asumirlas y de reinventarnos gracias a ellas”.